Buenas noches a las 3:22 de la mañana.

Y me iré a fingir que duermo, a cerrar los ojos y soñar en negro.
Ver una neblina en vez de un sueño porque mi mente no quiere que me ilusione con cuentos. Porque si empiezo a soñar, empezará una pesadilla y entonces cuando despierte, no sabré si aún vivo en ella o si he despertado de verdad.